A principios de los 90, Tim Sweeney fundó la empresa Potomac Games en la localidad del mismo nombre, dentro del estado de Maryland. Se trataba de una empresa dedicada al desarrollo de videojuegos y tecnología. La empresa se convertiría con el tiempo en Epic Games, una desarrolladora principalmente conocida por crear el motor Unreal, que también da nombre a una famosa saga de shooters en primera persona, y también Gears of War, otra saga de acción bastante popular que puso en el mapa a esta empresa, ya en el nuevo siglo. Cuando Epic estaba naciendo, Apple ya se había lanzado a la conquista de los ordenadores personales con sus primeros Mac, y todavía no había expulsado al genio Steve Jobs de sus filas. Los caminos de ambas empresas tardarían en cruzarse, pero cuando lo han hecho, el resultado ha sido bastante controvertido.

Y es que Epic es, desde hace unos años, una de las firmas más potentes dentro del mundo del videojuego, gracias sobre todo al lanzamiento de un título que ha marcado un antes y un después en el juego online: Fornite. Se trata de un título multijugador de acción en el que cien jugadores de todo el mundo se enfrentan en un territorio determinado hasta que solo queda uno en pie. El éxito del juego ha sido tan brutal que ha permitido a Epic Games ganarse una posición de ventaja dentro del sector, incluso lanzando su propia tienda, la Epic Game Store, para enfrentarse a la todopoderosa Valve. Fornite les ha traído muchas alegrías a sus creadores, peor también alguna que otra polémica, como la que se desató en el mes de agosto  con Apple al retirar el juego de su tienda oficial, por incumplir, según ellos, las normas de la propia Appstore.

La relación inicial entre ambas compañías

Para que un juego se incluya dentro de la Appstore, la tienda oficial de Apple, debe pasar cierto filtro por parte de la empresa de Cupertino, que se cuida mucho de saber lo que incluye en su catálogo. Al llegar Fornite, el éxito  masivo que consiguió le abrió las puertas de esta tienda digital, aunque eso sí, aceptando los términos que cualquier otro juego debe aceptar para entrar. En un principio Epic Games dio su brazo a torcer y firmó el contrato, aunque siempre se dejó caer que estaban en una clara desventaja en algunos términos, como por ejemplo el tanto por ciento total que se llevaba la propia Apple en las compras in-app en la aplicación, uno de los puntos más controvertidos dentro de la Appstore. La situación se solventó con una negociación por ambas partes, pero en agosto Epic Games decidió romper el acuerdo.

Epic Games rompe su acuerdo

A mediados del mes de agosto, Epic Games decidió dar un giro sorprendente a la política de compras in-app de Fornite, bajando el precio de los pavos, la moneda virtual que se utiliza en el juego para todo tipo de compras, y cambiando el sistema de cobro del mismo, con lo que dejaba fuera a las plataformas en sí, asegurándose todo el beneficio para sí misma. Esto, evidentemente, molestó muchísimo a Apple y también a Google, que mantenía Fornite igualmente en su tienda virtual. Se calcula que ambas plataformas estaban perdiendo en torno a un 30% de lo que generaban con esas monedas virtuales, tras este movimiento. Por eso Apple decidió contraatacar y sacó de su tienda virtual a Fornite, declarando oficialmente la guerra a Epic Games y acusándoles de incumplimiento de contrato.

El vídeo de Epic Games ridiculizando a Apple

La empresa de Fornite no iba a quedarse sin responder, por supuesto, y lo hicieron de una forma bastante divertida, aunque no para Apple desde luego. Crearon un vídeo defendiéndose y atacando a los de Cupertino por considerar que estaban creando un monopolio con prácticas abusivas en sus condiciones de contrato para entrar en su tienda virtual, condiciones que Epic Games decidió saltarse al considerar que no eran apropiadas, a pesar de haberlas firmado en su momento. El video de respuesta trataba de ridiculizar a Apple, llegando a formar un equipo con el que la empresa se defendía del veto de su rival, y provocando un enfado aún mayor en las oficinas de Cupertino. Apple, por supuesto, tampoco se quedó callada y lanzó un feroz comunicado en el que se acusaba a Epic Games de haber llevado a cabo prácticas deshonestas y no cumplir con los contratos firmados.

Denuncias

La guerra no tardó en llegar a los tribunales. Epic Games acusaba a Apple de prácticas abusivas y de haber retirado sin motivo su juego de la Appstore, incumpliendo así el contrato firmado años antes. El juego seguía disponible dentro de la Epic Games Store, pero no directamente en la tienda virtual de Apple. La empresa de la manzana, por su parte, se querelló igualmente contra Epic Games aludiendo al incumplimiento de las normas del contrato firmado, al haber tomado la decisión unilateral de cambiar el modo de cobro  de las monedas virtual en el juego Fornite. Las denuncias llegaron a los juzgados y el caso ya se está dirimiendo en Estados Unidos, con mucha atención por parte de la industria porque podría suponer un revés brutal para Apple en caso de perderlo.

Situación actual entre ambas compañías

Uno podría pensar que un mes y medio después, las aguas podrían haber vuelto a su cauce, pero nada más lejos de la realidad. Inmersos como están en el juicio, y sin ninguna intención aparente de negociar, Apple y Epic Games siguen enfrentados. Fornite está desaparecido de la tienda oficial de Apple, aunque se puede descargar a través de la Epic Games Store, que curiosamente sigue disponible en la Appstore. Por lo demás, las últimas informaciones que se han conocido es que la jueza del caso a afeado a Epic Games su forma unilateral de hacer las cosas, aduciendo que ha sido deshonesta con Apple y con lo firmado anteriormente en su contrato de vinculación.